viernes, 28 de abril de 2017

Cuidando al profesional en Navarra

Según cuenta la historia, Alfonso I el Batallador, fundó en el siglo XII esta villa medieval: Puente la Reina. Uno de los enclaves de mayor sentido compostelano situados en Navarra.

Encuentrosconconciencia tuvimos la suerte de ser invitados por nuestra amiga Gaztelu Lus, que trabaja para Pauma realizando formación en Constelaciones Familiares a dos grupos de profesionales. Allá fuimos. Más de cincuenta personas dedicadas a la ayuda psicosocial: trabajadores sociales, educadores sociales y psicólogas. Detrás de cada uno de ellos había un marco laboral bien diferente. Algunos se dedican a la intervención con violencia de género, otros llevan el programa educativo en familias y menores en situación de riesgo (negligencia, malos tratos, abusos), también están los expertos en inserción laboral y social y los que trabajan en servicios sociales. Había mandos intermedios, con otra responsabilidad de cuidado y organización, y con un nivel de estrés diferente.



El ambiente se notaba lleno de nivel profesional pero aun así, sobresalía el humano. Una sensibilidad por “el otro” (el cliente: persona-familia-grupo) al que acompañan, les impulsó a inscribirse de manera inmediata en nuestro pequeño curso. En Pauma saben que una de las mejores maneras de cuidar a los profesionales es ofreciéndoles conocimientos y técnicas que aumenten sus habilidades.

Nuestro día fue intenso. Pudimos “tocar” los Órdenes del Amor desde la teoría y desde la práctica. Nos habíamos propuesto pasar una jornada amena, ante todo, así que ideamos unas dinámicas que llevaran a la reflexión y al aprendizaje en un entorno lúdico.

En medio, los alumnos de hostelería, cocinaron para nosotros y repusimos fuerzas con sus exquisiteces ¡Gracias! Les espera un buen futuro también a ellos.

Terminamos con una constelación familiar, porque sabemos que la verdadera comprehensión sucede cuando se realiza la propia, se hace de representante o se está de observador. Y aun así no está garantizado. Todo va a depender de cómo se mantiene la mirada a lo que está ocurriendo, a lo que se muestra. Y se mostró una Realidad fuera de lo cotidiano, en un espacio sin juicios ni moralidad, solo hechos y vidas llenas de sentido.

Agradecemos a todas y todos los participantes haber elegido esta temática para su formación y a Gaztelu, por habernos elegido a nosotros. También a Cristina, la coordinadora de los cursos y a Jesús, el director del Centro Puente, por su acogida.

Os deseamos lo mejor y ojalá nos veamos de nuevo para seguir aprendiendo, disfrutando juntos.