El Trabajo
Social Clínico (TSC) estrena melodía. Ha sido una composición laboriosa que
duró algo más de un año, pero ha valido la pena. Somos diez autores y Amaya
Ituarte. Esta, además de autora, es la artífice de la obra. Para mí ha sido un
honor colaborar a su lado. Después de su primer libro sobre el tema, en 1992
“Procecedimiento y proceso en TSC”, donde marca y enmarca el TSC, muchos hemos seguido la
ruta. Esa lectura me abrió paso a lo que llevo realizando en el ámbito de la
salud. Pero sobretodo me dio seguridad profesional, ya que la dimensión clínica
y terapéutica de mi trabajo, necesitaba,
al igual que en otros países, una identidad propia.
Después de
veinticinco años, Amaya se aventuró con otra obra más ambiciosa y arriesgada,
decidió reunir a algunas y algunos autores que realizamos TSC y nos invitó a
contar nuestra experiencia. “Prácticas del TSC” como bien dice ella, es una
polifonía que recoge reflexiones teóricas y modelos de intervención que
muestran la andadura de nuestra disciplina, siempre hacia delante, por cierto.
Ahora que
el libro ya está en las librerías, me siento doblemente afortunada. La sinergia
y el entusiasmo del grupo que hemos formado, me impulsa a continuar mi
trayectoria en el TSC de manera diferente. Lejos queda mi individualismo y
carrera en solitario. Mi capítulo, el cinco, en el corazón del libro, se me
antoja una metáfora compensatoria donde me siento arropada por grandes profesionales,
científicos y profesores del TSC: Amaya
Ituarte, Josefa Fombuena, Eva Garcés, Carme Rovira, Jonathan Regalado, Juan
Herrera, Càndid Palacín, Inmaculada Asensio, Pepa Cardona y Dolores de Pedro.
Muchas
gracias y un abrazo grande. A todas y
todos.